Gran Premio de Singapur de Fórmula 1

Carlos Sainz se doctora en Singapur

El madrileño logra la segunda victoria de su carrera dominando de principio a fin

Así hemos vivido el Gran Premio de Singapur de Fórmula 1

sainz singapur
Sainz se lleva la victoria en el GP de Singapur.
Guillermo Sáez

Carlos Sainz se ha doctorado con una espectacular victoria en el Gran Premio de Singapur. 14 meses después de su primer triunfo en Silverstone, el madrileño ha vuelto a reinar en la Fórmula 1 completando un fin de semana solo al alcance de los elegidos: ‘pole’ en la clasificación del sábado y dominio absoluto de la carrera el domingo. Cara para el madrileño y cruz para Fernando Alonso, que se ha quedado sin puntuar por primera vez en toda la temporada tras un día para olvidar. Sufrió infinidad de problemas y cruzó la meta en última posición.

Era el fin de semana perfecto, el único donde la apisonadora de Red Bull se había encallado por sorpresa, y Sainz no desaprovechó la ocasión. Murió la racha de diez victorias seguidas de Verstappen y celebró Ferrari su mayor alegría de la temporada a los lomos del español, superior también a su compañero Charles Leclerc. Una vez más. La escudería italiana no ganaba una carrera desde el 10 de julio de 2022 en Austria. Completaron el podio Lando Norris y Lewis Hamilton.

La salida de la prueba fue tranquila, huérfana de incidentes, perfecta para los intereses de Sainz, que no dio ni una opción a sus perseguidores de arrebatarle el liderato. De hecho, se entretenían en su propia pelea, con Leclerc adelantando a Russell. Ferrari situaba a sus dos coches al frente de la carrera y redondeaba un arranque soñado, aunque el monegasco perdería fuelle posteriormente.

El primer tercio de la prueba fue una batalla tan aburrida como táctica, con todos los favoritos reservando neumáticos en una carrera de mucho desgaste. Hasta la vuelta 20 no se produjo el primer evento noticiable, un choque del Williams de Logan Sargeant que obligó a entrar al coche de seguridad. Todos entraron a cambiar gomas salvo los Red Bull y Alonso sufrió una salida de pista que le penalizó con una sanción de cinco segundos. Noticia nefasta en una carrera tan apretada.

Restaban 40 giros hasta la bandera cuadros y Sainz montaba neumáticos duros con los que confiaba en no tener que volver a parar. El madrileño volvía a imponer un ritmo suave para conservar gomas y desesperaba a Russell. El británico le pisaba los talones, pero sabía que no tenía nada que hacer salvo que el líder cometiera un error. Así son las cosas en el apretado recorrido de Singapur.

Norris, el amigo de Sainz

A falta de 18 vueltas un nuevo incidente agitó la coctelera. La avería de Esteban Ocon, cuyo Alpine le dejó tirado, obligó a dirección de carrera a activar el coche de seguridad virtual. Mercedes vio la oportunidad de una apuesta arriesgada y no dudó: mandó a sus dos pilotos a ‘boxes’ para cambiar neumáticos sabiendo que perderían posiciones, pero que serían mucho más rápidon que sus rivales en las últimas vueltas. Sainz afrontaba esta parte final de la carrera protegido por Lando Norris y Leclerc, segundo y tercero, respectivamente. Por poco tiempo.

 

Los Mercedes, cuarto y quinto, eran balas, mucho más rápidos que sus rivales, y Russell y Hamilton se lanzaron con furia a por la victoria. Era una auténtica contrarreloj final en la que Sainz veía cómo iba mermando su ventaja sobre los británicos. A Leclerc le quitaron las pegatinas, pero ahí murió su intentona. A falta de cuatro vueltas, el español, Norris y los dos Mercedes estaban pegados. Más emoción imposible. Lando, muy amigo de Carlos desde su época juntos en McLaren, realizó una labor perfecta creando un tapón de valor incalculable. A Russell le pudo el ansia y estampó su coche en la última vuelta. La victoria era de Sainz.

 

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